El pasado 10 de octubre se celebró el Día Internacional por la Salud Mental. La celebración de este día trata de sensibilizar al público acerca de los problemas de salud mental y se fomenta el debate sobre los trastornos mentales y las inversiones en servicios de prevención, promoción y tratamiento.
Este año, 2012 se celebra el 20 aniversario de la conmemoración de este día. La Federación Mundial de la Salud Mental ha dedicado este día a la Depresión: una crisis mundial. El objetivo es concienciar sobre la necesidad de brindar más atención a la depresión, como crisis internacional en aumento, y estimular a los gobiernos y a la población civil a que se enfrente a la depresión.
A través de este informe se hace especial hincapié en el hecho de que se trata de una enfermedad que puede ser tratada con éxito. La depresión es un trastorno mental muy común que puede tener consecuencias severas, afecta a todos y todas sin distinción étnica, racial, geográfica o socio económica, e impone una carga económica significativa a nivel mundial, no sólo a los individuos afectados, sino también a sus familias, empleadores y sistemas de salud. Además, si no se recibe el tratamiento adecuado, puede ser causa de peligrosidad para uno/a mismo/a o para terceros.
Salud Mental en cifras
En cifras, hay que recordar que el 22% de la población padece episodios de ansiedad y depresión en algún momento de su vida y, son éstas, las principales causas de discapacidad en todo el mundo y la cuarta parte de las visitas a los centros sanitarios.
Estos datos publicados por la O.M.S. evidencian que 1 de cada 4 familias posea al menos un miembro con un trastorno mental diagnosticado. Esta realidad hace que, como cada año, se lance un mensaje a la población de la necesidad de entender la salud mental como parte fundamental en nuestra calidad de vida y por tanto, la necesidad de cuidar de ella a través de programas de prevención e información.
La depresión afecta a más de 350 millones de personas de todas las edades y en todas las comunidades, y contribuye de modo significativo a la carga mundial de morbilidad. Se dispone de tratamientos eficaces contra la depresión, pero el acceso a ellos es problemático en la mayoría de los países, y en algunos solo lo reciben menos del 10% las personas que lo precisan.
Por todo ello, debemos plantearnos invertir en salud y bienestar , siendo la manera más efectiva de prevenir este tipo de malestar.
«Dedícate un tiempo». http://www.omanancial.org/html/